La Cocotte

Una Cocotte es una olla o marmita donde se puede cocer, guisar, estofar… y también puede meterse en el horno. Este recipiente de cocción se ha hecho desde sus inicios de barro, posteriormente barnizado, o de porcelana con sus dos asas laterales (aptas para el horno). Pero actualmente es más habitual encontrar preciosas cocottes en hierro fundido, en ambos casos la difusión del calor es homogénea.

La Cocotte permite cocinar los alimentos en su propio jugo, no es necesrio de añadir mucho líquido para la cocción porque al cerrar con la tapa se condensa el vapor, es ideal para cocciones prolongadas a baja temperatura

 Hay mil formas, tamaños y colores, las que yo tengo son heredadas de mi madre, si no tenéis ninguna os recomiendo que os hagáis con una, porque son súper útiles. En ellas se puede cocinar de todo, meterlas en el horno y servir directamente a la mesa. Pero sino tenéis no pasa nada se puede hacer en unas cazuelitas de barro.

La receta de hoy es muy fácil además queda muy bien tanto de primer plato como de segundo, ésta es una de las preferidas de mis hijos, porque les divierte la forma de presentarlo!!! Y es el plato por excelencia para cocinar en cocotte, de hecho el nombre lo ha adquirido por el recipiente: Huevos Cocotte.

Ingredientes: (para dos mini cocottes)

- 10 gambas peladas y crudas
- 2 huevitos de codorniz
- 2 ajos
- sal
- pimienta blanca


En cada cocotte se dora un ajito en láminas, y se añaden las gambitas crudas y peladas, se remueven un poquito y enseguida se añade el huevo de codorniz y se pone sal y pimienta blanca, y en cuanto se cuaja el huevito se retira del fuego, y listo!!!

Si no tenéis una cocotte es buen momento para pedírselo a los Reyes Magos, ¿no os parece? Y así empezáis a escribir la carta!!!